Amlo: del Discurso de Odio y Violencia a los Primeros Aprestos Delictivos de Odio
* A la espiral ascendente de violencia del discurso de Amlo ha correspondido una espiral descendente de la aceptación pública de su causa, que incluye a medios, nacionales e internacionales, que hasta la semana pasada mostraban simpatía por sus propuestas, sus protestas o sus causas.
A la implícita decepción mostrada por el New York Times desde el sábado, a raíz del acto nudista de Amlo en su entrevista con Carmen Aristegui (en la que desnudó su discurso postelectoral de todo sustento legal y probatorio) se unió el encuadre crítico de ese diario —como el de casi todos los medios internacionales— al discurso de la “resistencia civil” lanzado en la manifestación del domingo.
Y la tendencia continuó ayer con la presentación de la entrevista del Financial Times a Manuel Camacho, más bien a manera de toque de alarma, y culminó con el editorial de El País que, con la descalificación a la ruidosa —y cada vez más violenta— campaña postelectoral de Amlo, parece ir dejando, al menos en algunos espacios, las veleidades de aliento al fenómeno del populismo mexicano que tanto han dañado —lastimosamente— la calidad y la reputación en México del diario considerado hasta hace poco como el mejor de habla hispana.
A ello hay que agregar la primera encuesta postelectoral dada a conocer hasta ahora, la que levantó GEA/ISA entre el 8 y el 10 de julio y cuyos resultados más significativos publicó ayer Ciro Gómez Leyva en Milenio.
Contra el discurso de Amlo, 15 por ciento de quienes votaron por él piensan que las elecciones fueron limpias, y ocho por ciento no tienen opinión al respecto. Sólo por este concepto, analiza el periodista, Amlo “perdió entre dos y tres millones de seguidores; dos o tres millones de votantes que no creen en las pruebas de fraude que está presentando su candidato”.
jose.carreno@uia.mx
http://www.cronica.com.mx/nota.php?id_nota=251918
Technorati Tags: México, Mexico, pol?tica mexicana, elecciones México 2006, Rafael Moya Saavedra, Juego de Mapaches
A la implícita decepción mostrada por el New York Times desde el sábado, a raíz del acto nudista de Amlo en su entrevista con Carmen Aristegui (en la que desnudó su discurso postelectoral de todo sustento legal y probatorio) se unió el encuadre crítico de ese diario —como el de casi todos los medios internacionales— al discurso de la “resistencia civil” lanzado en la manifestación del domingo.
Y la tendencia continuó ayer con la presentación de la entrevista del Financial Times a Manuel Camacho, más bien a manera de toque de alarma, y culminó con el editorial de El País que, con la descalificación a la ruidosa —y cada vez más violenta— campaña postelectoral de Amlo, parece ir dejando, al menos en algunos espacios, las veleidades de aliento al fenómeno del populismo mexicano que tanto han dañado —lastimosamente— la calidad y la reputación en México del diario considerado hasta hace poco como el mejor de habla hispana.
A ello hay que agregar la primera encuesta postelectoral dada a conocer hasta ahora, la que levantó GEA/ISA entre el 8 y el 10 de julio y cuyos resultados más significativos publicó ayer Ciro Gómez Leyva en Milenio.
Contra el discurso de Amlo, 15 por ciento de quienes votaron por él piensan que las elecciones fueron limpias, y ocho por ciento no tienen opinión al respecto. Sólo por este concepto, analiza el periodista, Amlo “perdió entre dos y tres millones de seguidores; dos o tres millones de votantes que no creen en las pruebas de fraude que está presentando su candidato”.
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posted by Rafael Moya S. at 8:28 p.m.
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